Entre los aportes incluidos en la novela se destaca la creación de una convención (Ø ø), que en el libro se le denominó Tachas, en honor al escritor mexicano Efren Hernández; ellas permiten denotar los fenómenos silentes (sin que exista un oxímoron), son signos dobles (así como los signos de admiración) que se abren para indicar que sigue a continuación (o abre el silencio) un fenómeno silente (olvido, miedo, rumor de la noche, etc.) luego continúan espacios en blanco que indican de manera proporcional la duración de estos silencios, es decir a mayor tamaño de los espacios en blanco, mayor es el silencio o fenómeno silente; al final se cierra con la misma convención, esta vez en minúscula, marcando así el final de los fenómenos silentes.
Otro de los aportes de la novela se encuentra en sus personajes principales: el silencio, el olvido y el municipio de El Molino, los dos primeros tienen diálogos en cada uno de los capítulos gracias a las Tachas, que aportan una lectura bastante agradable a los lectores, además de una experiencia individual subjetiva.
La novela propone un rescate de los valores culturales de cada región, a través de mostrar que son muchos
|
Novela Conceptual |
0 comentarios:
Publicar un comentario